Última sesión de Principia de la temporada
Además de la observación pública en Monda, el pasado viernes 27 de junio también tuvo lugar la última de las sesiones públicas de este curso en Principia. A pesar de coincidir con la inauguración de los Juegos Olímpicos de Londres 2012, la asistencia de público fue masiva, estableciéndose posiblemente un nuevo record absoluto para esta actividad con más de 200 participantes.
Como siempre, pudieron disfrutar de los experimentos en la Sala Faraday, los módulos didácticos de la Sala Tomás Hormigo, las sesiones de planetario y, cómo no, de la observación astronómica propiamente dicha desde la azotea y el observatorio. Debido a la afluencia de público, tuvieron que realizarse más sesiones de lo normal, pero la noche acompañó y todos los asistentes pudieron disfrutar de la observación, tanto a simple vista como a través de los telescopios.
El cielo estaba particularmente transparente, lo que facilitó la visión directa de algunas constelaciones, como la Osa Mayor, la Osa Menor o el Cisne, así como de las estrellas más brillantes, entre las que destacaban las que forman el triángulo de verano (Vega, Deneb y Altair) y otras como Arturo o Espiga (Spica). La Luna creciente, Saturno y Marte se mostraban como los astros más llamativos del firmamento, y la visión de los dos primeros a través de los telescopios instalados no dejaba indiferente a nadie, en especial a los numerosos niños que se acercaron con sus familias en esta ocasión. Lamentablemente, la contaminación lumínica impedía siquiera vislumbrar la Vía Láctea, que en esta época del año ofrece sin duda un especto estremecedor desde los cada vez más escasos entornos libres de este tipo de contaminación.