Crónica del III Congreso Pro-Am en Huesca
Entre el 6 y el 8 de diciembre de 2019, se celebró en Huesca el III Congreso Pro-Am, un evento de colaboración entre profesionales y amateurs similar al de los Congresos Estatales de Astronomía. Esta edición estuvo organizada por la Sociedad Española de Astronomía y la Agrupación Astronómica de Huesca.
Estos Congresos son una buena oportunidad para presentar trabajos de investigación, debatir propuestas, entablar posibles líneas futuras y establecer amistades con los demás compañeros de afición, pertenezcan a alguna agrupación astronómica o no. En mi caso, fui representando en solitario a la Agrupación Astronómica de Málaga “Sirio”, que para esta edición se presentaba bastante lejos de Málaga (obstáculo que en mi caso no existe al vivir cerca de Barcelona).
Las ponencias se desarrollaron en su totalidad en el Parque Tecnológico Walqa, a unos escasos minutos en coche de la ciudad de Huesca. Dentro de Walqa teníamos el propio Planetario de Aragón, con unas instalaciones envidiables que veríamos durante el primer día.
Primer día. Llegada e inicio del Congreso.
Las jornadas se dividían en 6 bloques temáticos, en el que había de todo y para todos. El pistoletazo de salida lo daría el ponente Jaime Zamorano, para hablarnos del proyecto colaborativo NixNox para lograr recoger mapas de brillo de cielo nocturno desde muchos lugares de la geografía española, ya sean idílicos para la observación o justo lo contrario.
Fuera de la sala de conferencias se exponían los distintos pósteres científicos presentados. Además, teníamos la tradicional venta de libros astronómicos, en donde destacaba la Colección Astromarcombo, formada por una selección de libros escritos por amateurs y profesionales sobre cuestiones muy interesantes. Desde luego, destaca el éxito del libro de “Observación espectroscópica” de Miguel Rodríguez, agotado en tiempo récord tanto en el CEA de Cuenca como en este congreso. En el resto de títulos hay temas variados, como exoplanetas, fotometría y el dibujo astronómico. Sería el director de esta colección, Jordi Lopesino, quien hablaría acerca de Astromarcombo y presentaría los dos nuevos títulos de la colección. Sin duda, el congreso era un momento propicio para llevárselos firmados.
En el resto de este primer bloque, Alejandro Sánchez de Miguel discutiría sobre la definición de qué se considera un astrónomo y Santiago Pérez Hoyos nos recordaría la importante figura del astrofísico vasco Javier Gorosabel, en cuyo honor se han creado los premios que hoy día llevan su nombre.
Tras el café de la tarde, se abriría el segundo bloque para adentrarnos en el “Observatorio Virtual”, con José Luis Navarro, Enrique Solano y Mirian Cortés. Con estas charlas y talleres, aprenderíamos las herramientas básicas y la importancia que adquiere el Observatorio Virtual para la investigación de la astronomía.
Para concluir este primer día de Congreso, visitaríamos el Planetario de Aragón (en la foto inferior) compuesto, entre otras cosas, por un observatorio de techo corredizo, un gran y confortable planetario y un fantástico simulador 4D que nos llevaría dos siglos hacia el futuro para realizar un alucinante viaje que te dejaba mareado al final. De aquí pasamos al cóctel de bienvenida para cerrar el primero de los tres días del Congreso. Llegaba el merecido descanso.
Segundo día. Jornada maratoniana.
La jornada del sábado se presentaba muy larga, con un programa bastante completo y variado. La mañana la abriría Montse Campàs (del Observatorio Montcabrer) hablándonos de la fotometría de cometas y asteroides, si bien en los últimos años y debido a la mayor importancia de los sondeos automáticos del cielo ha perdido fuerza. Ricardo Hueso, a continuación, nos cautivaría con su entusiasmo al explicarnos las colaboraciones Pro-Am en relación a las atmósferas planetarias del Sistema Solar. La conferencia de Alberto Castellón tuvo que ser replanificada debido a que tuvo un pequeño percance. Una vez de vuelta al Congreso, nos hablaría de la red de detección de bólidos y meteoros de la Sociedad Malagueña de Astronomía y la Universidad de Málaga, una red en continua expansión con constantes mejoras para tener vigilados nuestros cielos. El encargado de cerrar este bloque sería Antonio Carvajal, de AstroHenares, quien comentaría cómo los amateurs colaboran para determinar la forma y densidad de los asteroides mediante la herramienta Gaia-GOSA.
Tras un breve descanso, empezaría el 4º bloque “Variabilidad y fotometría” de la mano de Adolfo Darriba, que se convertiría en una de las charlas más especiales del Congreso. Adolfo, del grupo M1 y de la AAVSO, explicaría las observaciones que ha llevado a cabo de unos blázares y sus predicciones en las curvas de luz, basadas en una serie de desintegraciones radiactivas de diferentes elementos. El método que describía distaba de ser el propio método científico, como se comprobaría en el turno de preguntas, pero hay que recalcar su insistencia en realizar de manera rutinaria las observaciones de estos blázares, y su empeño para buscar una base teórica que reafirmara sus predicciones. Sin duda, faltaba la compañía de un astrofísico en este campo que pudiera tomar los datos y estudiar a fondo la ciencia que hay detrás. Sin embargo, Adolfo, con su esfuerzo y humor, nos cautivó a todos.
José Joaquín Rodes seguiría para describirnos cómo poder obtener el periodo orbital mediante fotometría en las estrellas de tipo W Uma. Florence Libotte, de la Agrupación Astronómica de Sabadell y miembro del Groupe Européen d’Observation Stellaire (GEOS), continuaría en este bloque para hablarnos precisamente del GEOS y de la labor que realizan desde numerosos observatorios para el estudio de las estrellas variables pulsantes RR Lyrae. Ramón Naves, por su parte, nos hablaría de una comparativa de los distintos tipos de filtros fotométricos que se pueden emplear para el estudio amateur de supernovas, centrándonos en los prometedores Sloan. Los resultados que mostraba Ramón hablaban por sí solos: destacaba la calidad de las curvas de luz generadas, algunas de ellas empleadas en diversos estudios científicos. Juan Luis González Carballo, del grupo de Observadores de Supernovas (ObSN) y miembro de la AAVSO centraría su charla en explicar la utilidad del proyecto ASAS-SN para buscar fuentes transitorias, emitiendo alertas que los observadores amateurs pueden estudiar y confirmar. Finalmente, y tras la comida, el bloque se cerraría con la ponencia de Enrique Díez Alonso, del Instituto Universitario de Ciencias y Tecnologías Espaciales de Asturias (ICTEA), del Consorcio CARMENES y de la Sociedad Astronómica Asturiana Omega. En concreto, nos hablaría del proyecto CARMENES, que busca exoplanetas en torno a estrellas enanas rojas mediante detección por tránsitos. La ayuda amateur es importante en este punto para poder determinar la fotometría de estos objetos y descartar que la rotación se pueda confundir con la presencia de un planeta alrededor.
La jornada del sábado acabaría con una mesa redonda para buscar los retos de la colaboración Pro-Am, en la que participarían Jordi Lopesino como moderador, Joaquín Álvaro Contreras (Agrupación Astronómica de Cuenca), Mercè Correa (Agrupación Astronómica de Sabadell), Javier Salas (Agrupación Astronómica de Huesca), Santiago Pérez Hoyos (Comisión Pro-Am de la SEA) y Francesca Figueras (presidenta de la SEA). En este punto debo pedir disculpas por ausentarme para poder hacer turismo por la ciudad de Huesca…
Finalmente, la noche concluiría con la cena en el Hotel Pedro I de Aragón, donde nos reuniríamos un centenar de congresistas para prácticamente despedirnos de estas jornadas, ya que al día siguiente algunos saldrían bien temprano hacia sus lugares de origen.
Tercer día. Despedida.
Para los que quedábamos, la cita seguía por la mañana del domingo, en el que Arturo López Ariste nos subiría a la cima del Pic Du Midi para comentarnos qué se puede hacer allí y qué relaciones se tienen con los amateurs. La cima representa un paisaje bastante aislado, pero la astronomía amateur cobra un papel relevante junto al de los profesionales a través de la astronomía solar.
Comenzaba ya el quinto y penúltimo bloque del Congreso: “Observatorios y herramientas”, iniciándolo Joaquín Álvaro Contreras para explicarnos una relación entre la masa y radio del conjunto de exoplanetas conocidos extraída mediante inteligencia artificial. Pere Guerra, del Observatorio Astronómico Albanyà, continuaría el bloque aportando conocimientos acerca de la herramienta gratuita AstroImageJ para obtener el ajuste de las curvas fotométricas en los tránsitos exoplanetarios. Raúl Infante (con la ausencia de Aleix Roig que no pudo asistir en el último momento), comentaba un proyecto en el que se habían envuelto a raíz del programa de Coffee Break para fotografiar la galaxia M101 y sus alrededores para obtener la mayor información posible y exprimir al máximo el instrumento hasta llegar a las 100 horas de exposición. Los resultados, hasta el momento, alcanzaban las más de 50 horas de exposición, y mostraban el alcance de la astronomía amateur al ser comparado con la profesional.
Por último, arrancaba el sexto y último bloque bajo el título de “Contaminación Lumínica”, un tema que sufren tanto los profesionales como los amateurs y que se pone de manifiesto en cada congreso celebrado. Daría inicio Cristóbal García, de AstroHenares, para hablarnos de los fotómetros Tess y sus nuevas versiones fabricadas para la medida de la CL. La siguiente ponencia, a cargo de Rafael González, también de AstroHenares, trataría de uno de los fotómetros recién comentados, el TESS-W, que participaría en el despliegue de una red global, aún en crecimiento. Y, ya para acabar el Congreso, Juan Manuel Bullón, de la Asociación Astronómica de Aras de los Olmos, nos hablaría de la CL en los espacios naturales, en una presentación que tuvo que acelerarse para poder acabar a tiempo…
En definitiva, un congreso del que hemos aprendido muchísimas cosas, pero que, como siempre, se nos queda corto y con ganas de más. Precisamente, no hay una fecha fijada para el siguiente Congreso Pro-Am, ni tampoco lugar. Sin embargo, los asistentes tenemos marcada la fecha del 30 de abril, en la que tendrá lugar el XXIV Congreso Estatal de Astronomía en La Coruña organizada por la Agrupación Astronómica Coruñesa Ío, por lo que, si todo sale bien, allí nos volveremos a ver las caras.